domingo, 24 de junio de 2007

¿Por qué Madrid?


Madrid, ciudad que clama
por un alarido tensado,
con los dientes de oro
y la madrugada robada.

Madrid, ciudad prostituta
y de copa apurada,
de calle quebrada
y amor desbandado
y nómada, siempre nómada.

Yo te cuento las cinturas
que bailan cuando atardeces
en las fachadas.

Yo expiro el aire
de los versos que encierras
en la retina de los mendigos.
Yo replico las silabas
de tu silencio
y la piel que mudas
en las cuadras sin potros.

Vuelve a enlazar tu nombre
con tu historia castiza
y olvidada.

Vuleve a recoger
los recortes de sombras
en las elevaciones de lo alto.

Vuelve, una y otra vez más,
a tu nombre, a tu cuna
a tus aposentos.

Pero no me lleves contigo
que quiero escuchar el mar
en las gélidas aceras
y dormir a la luz
de los claveles y las farolas.

Madrid, ciudad prostituta,
maridas con la mirada de todos,
mientras pierdes tus manos
en tu orgullo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

señor... excelente!!

me ha encantado es segundo verso... para cuando nos deleitas con un libro?¿?¿

Anónimo dijo...

Lo de contar las cinturas de Madrid es un bello logro. Saludos.